Marea del atardecer en mi horizonte,
Espuma de plata en tu oleaje… infinito.
Naranjas son tus ropas y rosado tu rostro,
Atardecer de verano que me cautivas…
En la mente lluvia de pensamientos,
Que moja mis pensamientos de ti… aun de ti.
Gota a gota deslizando de mis ojos la añoranza,
La melancolía que me dejaron tus besos… amor en el ocaso.
Cotidianidad abrumadora que llena mi vida de rutina,
De imperfecciones de tu ausencia y soledades,
Que poco a poco se van mudando al baúl de tus cosas
Olvidadas en un rincón esperando el tren de tu regreso.
Y yo… aquí, en el desván de mi vida…
Mi niñez en frascos de colores.
Intentando recordar como era sentir
El miedo a poder perder tanto…
De perder lo perdido.
En este atardecer de verano,
Como el último de nuestras miradas,
De nuestros sueños con alas de palabras
Diluidas en el tiempo y vaciadas por la vida.
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